Tal vez fuimos polillas

Salida de tres para la frágil mirada que te quiere tocar, el recuerdo inflá un huevo; tal vez fuimos polillas ante la baranda de la muerte; tal vez es ahora como nunca antes y menos mal que viene para acá con unos panes con grasa, sale para acá abriendo las puertas de este lunes que se reproduce en la esquina. El mundo me habla de tu belleza, la luz de las sombras con alfileres me hacen una loncha de adorables caderas mentales a merced de mi tenedor y es bárbaro el casting y el pressing al que me entrego a esa nueva sociedad y me dejo llevar con el tórax y sus patas a donde quiera. Su nuca esta llena de láminas de olas de placer que me enloquecen, en forma de burbuja de mandrax asoma su lencería el jugo idiota de la locura de la galletita y la herramienta devorando a un hombre y sus abogados y te mata la entrada al velódromo de su labio hermético del deseo y llueven cucharadas de restaurantes como vos como yo o aquel que mira con tanto gusto el mismo plato del diálogo inferior a dos euros. No tenemos idea del anticipo ni el importe por el servicio que dice que tengo menos de dos euros de saldo o esperar a mamá buscando un poco mas de sueño.