Dios y la virgen

De bruces se levanta el ojo que se arremanga, una bridge una cric crac y se abre la puerta del cielo y en un minuto baja, el dia es una mierda, es un servicio militar este escalofrío por verle la cara, tocarle la mano, abrazarle el omóplato dulcemente y me sale al escupir un cacho de vacío sin querer mencionar este anuncio. El journal me da el paraguas y el colectivo de los tiempos congelan en bolitas las risas y lágrimas que están lloviendo como para un anuncio de restos de amores que dejan los fieles al reino de dios y la virgen y alguna otra historia. Se extrañan los solos del aire que los acribilla en la esquina, se desconocen los amigos algo, las caras cambian y ellas se dan cuenta que es cuento y lo narran con una dialéctica en 220 voltios a cualquier hora, tenemos tantos vínculos, necesitamos apenas unos segundos o després de la comida y contarte que te amo y guardar el correo con lo que hemos creado una vez más, fascinados y colocados por el olor del detergente.