pULp

Desde la muerte la risa va en la dirección de la vida errada en esa quimica distorsionada del olor a leche y a crema de puerros, señala los tomos de la ilusión que son máscaras de velos que te acarician ahora en este hospital de caricias con sus ausencias que no vienen como todo sueño y se desarma su cerquillo sus raviolones en un roce de su piel de ocultas sienes en la cama fascinada colgada falseada en una payasada que no pertenece a lo real. La escritura no hablo de su disket de pulp de lo que escribe en su living ni dentro de su mente de cerveza china el living sabe los movimientos del sofá y el brillo de su esfera dentro de una intimidad de pure de papa, el tiempo sabe todo cada gracioso morbo de tres rostros cuando la eyaculatión de la nada se rasca la cabeza, el silencio tiene muchos escritos de su piel cómica la distancia siempre encuentra vegijas para la foto de nabos en un lugar donde el amor se pone una peluca y como un gran huevo abraza a la monja y se la lleva hacia su tumba, la monja es trucha sus ojos son de acelga su sonrisa ya no es de fósforo ni sus manos son de metal, todo esta confuso en esta esfera donde lo escondido mueve sus cubiertos, todo es hermoso es feo en esta ensopada letra que solo busca no llegar a tu pérdida armadura de humo, la ciudad no te extraña mi corazón no te olvida nadie sabe todo los dulces que estaban almacenados en el alma ni la Dgi ni la Iglesia ni este previlegio de volar ahora a arrucarme a tu piel a tu espalda de porotos viejos de peces de corcho y nadie sabe lo que te extraña mi olvido nadie se imagina el embarazo de la soledad solo el aire y sus sonrisas de enero, la insignificante belleza en otro water mirando un culo, la hermosa quietud de la carencia sonriéndo como un muslo de colibrí, todo se transforma en este mundo, en esta suerte de escribir en esta cosa que no encaja en su escritorio que ya no existe en su consumo en su hipódromo en su botón de la cocina en su cuerpo de otro envase de otro estuche para las pastillas en otro colador para fideos para nada mas que un cuerpo un rato una nada en la cama con una estatua llena de billetes para las cucarachas y la lluvia y su hedor a 100 doláres.