Kolynos

Manejaba las horas cambiadas desde hace muchos años, se cambiaba de nombre, de nariz, tenia uno de los mejores plantares, vivia en otro planeta completamente escafrandado y no existia ni la envidia ni los deseperados, no habia cielo, nadie era importante y nadie sospechaba de nadie, todos escuchaban al mago algo que sacaba gotas de aire, no habia cambio climatico ni huracanes ni ejercitos ni radios ni tiramisu ni politicos, pero habia felicidad, se sentia en las historias que la prima perdida de la mama de un dandy contaba entre regalos y risas a todos los invitados encantados de escucharla, piruchos, kolynos, alucinados de historias de boxeadoras en el hocico traídas por los animalillos...

Dibujo: Ricardo Yates.