Sexo arquitectónico

Dicen que no se hace el amor porque estan en otra, dicen que son sosos y que están siempre con prisa por esto y por lo otro, pero el sexo explota en Barcelona en gotitas de luces rojas amarillas azules para los ojos de los paseantes y de los aviones y de los pelicanos y quedan prendidas al pene monumental de la torre Agbar y vuelan por el mundo arquitectónico y ahora merci a Laporta vamos a ofrecer a toda la humanidad la nueva vagina monumental del señor Foster que forman la pareja con la torre del agua mas gustosa con permiso del calderero Gaudí.
Ven queridos ciudadanos, feroces tipos de uva multisexuales, ahora no podrán decir que no pasa nada en esta ciudad, que la gente es sosa o es fria o calculadora o desconfiada o desesperada por el placer al menos de la imaginación con otros sueños que quedaron por el camino del sexo; ahora llorando disimuladamente vendrán los locos sonriendo y murmurando con el viento lleno de coronas de novia.