Le miracle

El milagro de amar ese sueño construido en el aire con los dulces deseos que el sentimiento encuentra en esa amorosa confusión de todo lo admirable en ese diamante como lo que somos dejando todo en ese encuentro en las nubes y es la más deliciosa cosa que te pasa pocas veces en esta muerte llena de odios y humaredas ese milagro que ha sacado lo puro dentro de todas las fotos e instintos ese miracle en aquel momento fue lo mejor de la vida y el azar con las sicindelas del encuentro sobre dos miradas dos corazones dos mitades que quieren tocarse quieren juntarse con ese objeto amado humano que del otro lado del hueco de los ojos ya no está cuando salís del agua cuando bajas del globo cuando la mas dulce de las armonias no espera entre los miedos  y solo la poesia aún proporciona esa admiración a pesar de todos los errores de los esenciales rasgos de todo amor y sus descripciones novelescas, aquella mirada sigue en el balcón del espacio sin ofrecer nada sin emoción sin alegría aquella mirada sigue transformada en un ser diferente en una dulce duda en otra sabrosa coqueta mezcla de la decoración metida en esa cabeza llena de hermosos amores que están por nacer en otro papel de la atención del otro sexo y en esa constante cinta de sorprender con adornos con las cuestiones económicas de la junta y sus cuidados en la pintura y en el escabeche de la cama y sus apetitos de un paseo, el tercer abrazo de la oscuridad la silueta del olvido el silencio y la ternura alejada de la realidad repitiéndo una pizza con un edificio tomando un helado con un hospital y el milagro de amar bajando precipicios subiéndo rascacielos llevando una porción de pastafrola a cualquier mundo para su victoriosa melancolía su otro horizonte su todo enseguida sus pianos su origen desde el comienzo de los amores admirados decepcionados en las copas de vino en la pared en el aire en la luna del cabo en el ropero en este derecho a mirar desde el cielo este motivo para disfrutar aunque falta ese despilfarro del amor absurdo ahora en los costados de la boca conversando con un jabalí bajo ese ojo que mira una ciudad donde encontró un día el amor suspendido en su corazón con todos sus honores escapados desde un sueño todavía volando bajo los párpados.