Tantas raras formas

El encargado del tiempo toma este escrito, ocupa este instante aporta su manera y aparece en este acto en otro plano para que los ojos ocupen la nada en esa inclinación del fondo que en cierto sentido es eso nada. El fondo de la noche y sus ardientes complejos, las maneras de la belleza del cementerio la generosidad del placer del extraño cerebro la ternura de la temblorosa angustia y su genial manera triste, el poder del control la enfermedad del mal y sus confundidas lágrimas el alimento incierto el trozo putrefacto de un abrazo, el horror de la indiferencia y su silenciador que corre como un genio sin cabeza ni piernas, la noche que te ve perdida entre tantas cosas escondidas a través de la oscuridad del efecto del vómito y su silencio mas grande que la sombra de su cara de tantas raras formas.