La casa de las pelucas

Tiene un tablero de basket en el porsche,
tiene internet, parrilla, biblioteca y
ellas, las pelucas aparecen a cualquier hora
como hormigas como sapos principes como una lengua
como ladrillos para seis sueños como una lata de cerveza,
a veces pican algo entre los libros entre los ombligos,
son modelos de jamón glaseado Ottonelo,
ellas están entregadas a cualquier cabeza
con la condición de la explosión sin peligro
con lluvia de sabores infaltables
como la Sidra Celta, la piscina tortuga
las pasas de uvas, la tarta de puerros
y a festejar de cada detalle de cada espuma
como moscatos frizzantes como arañas pollito
de los minutos que la casa quiera y como
un bols de acero inoxidable como un escurre platos
con servilletas navideñas con complementos de set
para salir a pasear con ellas cuando el deseo de agasajar
te despierta con un Whisky escocés 12 años Chivas Regal 1 L
y te devora dulcemente como una galletita hasta las ocho de la mañana.