Digamos que hace como dos siglos el loco amor otra vez piensa en tí y en nosotros, tengo la fragancia del adiós pegada en el retrovisor, el maravilloso abrazo de jazmines. Las cebras como veinte árboles un mono un elefante un ñandu y tres delfines de National Geográphic y el programa Redes con la Vuelta Ciclista de Madagascar vieron el beso desde la Caixa y el beso fugaz del amor se sabe es flor de crupier, deja caer una lágrima de la cola del piano en la moquette y abre la alas; la duerme le pega con las dos tiene llegada y salida, tienen equilibrio dieta equilibrada y en ese momento uno no tenia ni idea de esto y en este cambio hay nuevos cursos de soledad y no te piden nada para la iglesia, es más quiero que sepas que eres la hermosura del mundo y me alcanza con pensarte un poquito de mañana con el desayuno con pera de tarde con agua y a la noche con una manzana en este Almacén/kiosco que se muda de Eroski, te deja cuatrocientos mil abrazos y no entran todos, no importa nos arreglamos en la cocina con el sofá y el sol en el horizonte que sabe que desde el primer instante que la ví algo de su cara me fascina y que la espero, esta en mi lista sagrada, caricias huecas llevan esto, me hacen escribir sobre la dulce espera para su dulce cadena de pastafrolas en Estocolmo y en Granada y a preparar pedidos y manzanas como dos bananas en Amsterdan recordando que se ha perdut la fisica y la química o un soneto o una vaca o un poema de amor del otro que es un tango un pericón un Delivery un Druggstore un Shopping una bagette un Personal trainner un trekking un Magazine; la restrocturación, the winner of our Discontent, yo estoy pero no sé cuando y resulta encantador, resulta mágico aunque no me dice nada, nó sé donde esta ni yo se que hago y esta nada con el calor que hace no hace nada y que no diga nada no quiere decir que no la escuche al contario la veo.
Friday, June 12, 2009
Cuatrocientos mil
Digamos que hace como dos siglos el loco amor otra vez piensa en tí y en nosotros, tengo la fragancia del adiós pegada en el retrovisor, el maravilloso abrazo de jazmines. Las cebras como veinte árboles un mono un elefante un ñandu y tres delfines de National Geográphic y el programa Redes con la Vuelta Ciclista de Madagascar vieron el beso desde la Caixa y el beso fugaz del amor se sabe es flor de crupier, deja caer una lágrima de la cola del piano en la moquette y abre la alas; la duerme le pega con las dos tiene llegada y salida, tienen equilibrio dieta equilibrada y en ese momento uno no tenia ni idea de esto y en este cambio hay nuevos cursos de soledad y no te piden nada para la iglesia, es más quiero que sepas que eres la hermosura del mundo y me alcanza con pensarte un poquito de mañana con el desayuno con pera de tarde con agua y a la noche con una manzana en este Almacén/kiosco que se muda de Eroski, te deja cuatrocientos mil abrazos y no entran todos, no importa nos arreglamos en la cocina con el sofá y el sol en el horizonte que sabe que desde el primer instante que la ví algo de su cara me fascina y que la espero, esta en mi lista sagrada, caricias huecas llevan esto, me hacen escribir sobre la dulce espera para su dulce cadena de pastafrolas en Estocolmo y en Granada y a preparar pedidos y manzanas como dos bananas en Amsterdan recordando que se ha perdut la fisica y la química o un soneto o una vaca o un poema de amor del otro que es un tango un pericón un Delivery un Druggstore un Shopping una bagette un Personal trainner un trekking un Magazine; la restrocturación, the winner of our Discontent, yo estoy pero no sé cuando y resulta encantador, resulta mágico aunque no me dice nada, nó sé donde esta ni yo se que hago y esta nada con el calor que hace no hace nada y que no diga nada no quiere decir que no la escuche al contario la veo.
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