Trota Viruta

Al entrar en la pieza hablo del tiempo con el vaso de agua de la tarde que sale del baño y sale agua del espejo y agua en todas las miradas y mas agua de la tormenta del mercoledi napolitano inundando el resumen de la realidad en su tono sepia y plastelina, en poco más de dos horas el metro cuadrado estaba arriba de la cama, se esfumó su nave espacial en un solo momento, ahora viene con un fardo de buenos recuerdos, trota la viruta de lo que se pone a pensar la cabeza, en un minuto fugaz un solo segundo una obra desconocida, un dia perfecto con algo de adiós, por la rodilla de la T 4 de Barajas se fue y tanto diseño para nada, me levantó la vista que no ve nada y al final mastico 44 veces otro momento ahora como pistacho y su rostro reflejado en una excelente lectura, brindan los que no nos ven, entrá un tamaño de ilusión que no se sabe en que tiempo está, en que reestructura está ni la noche lo sabe, el dulce delirio del sueño que suelta poca merca y chau, adiós a todos, adiós al último verso que quedo sin importar, al prototipo de la ternura que quedo en espuma china y se aleja con el sol como un globo y el atardecer que parece tantear su mejilla al fondo del corredor del curso.