Thursday, June 04, 2009

Orificio

Los platos apenas lo deja el papagallo ahora mas hinchado se cuentan sus deseos sexuales, con qué mesa sueña cuál mano desea coger a la de queso, sueña con ella la barra, con él no se sabe porque no se sabe quién es y se lame para cambiar este tiempo tan necesitado, estamos rodeados de peces moribundos con colachatas con las neuronas sin contextos y sin minutos para verte; los detalles apuntan de más un pincho dos cuatro diez veinte cien mil y para desnudarse se cuentan las tapas que salen por otro pelicano que esta como muerto distorsionando los cristales de los insectos que bajan como un submarino francés hasta 6.000 metros de su desaparición entre catas de vino y hurtos libres como el viento; ella que es él y aquél enano alto caqui que esta detrás de toda la leche caducada no quiere nada de nada porque ya sabe todo, tiene todos los robos controlados estudiados con su vidente y la pose de cada foto regada por la belleza infantil de la mentira de su voz de gasolinera que necesita una jaula. Agotadas las poses el masaje del tiempo sacá sus vientres, sus camas y sus nadies, salen mas panes y conchas por un camarero con cara de otro para los cuadros que un día tendrán que hacer esto, no voy a decir como pienso que será su retirada de las tablas esta flor carnívora exclusiva para cubrir el orificio del impacto.

1 comment:

Anonymous said...

Hace tiempo o muchos escritos que no me siento aludida por tí. Mala suerte, pienso para mis adentros, aunque era de esperar: mejor que tú lo sé yo, que la vida cambia en un segundo nada más. Un abrazo de tu anónima aún fiel pero algo ausente.