En Roma, hace un par de semanas fue asesinada en una pelea vecinal por un enfermo de mierda a cuchilladas Tamara Monty de 37 años e
instructora de Mary G, una preciosa delfín que estaba moribunda en el puerto de Ancona y se crío con la ayuda de Tamara, a base de arenques, sales minerales y vitaminas y a base de mucho amor, de palabras de cariño, le enseño en una bañera a recuperar la confianza en sus capacidades natatorias y así revivió hasta convertirse en la estrella del delfinario Oltremare de Riccione, pero cuando hace unas semanas
un asesino loco acabó a cuchilladas con la vida de esta preciosa mujer. Mary G se hundió en la depresión, dejo de comer y el dolor del delfín por la muerte de Tamara es muy grande dicen los especialistas muy preocupados y los planes para recuperarlo hasta el momento no están dando buenos resultados.
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