La noche no para de hablar, diversos vientos se elevan sobre las torres ínfimos detalles desfilan ahora en este plano en medio de otro tiempo, los libros no pueden dejar de mirar, la noche peina las gasas del sol que tiene los ojos cerrados, la cosa comenzó con deslumbradas delicias, no es tan maligno como parece, desde un cuadro salen caricias, no tocan nada, la persona que quieren no está, hay una porción de goce que siempre estará en todos los colores, es asombrosa la combinación secreta de la locura, sea lo que fuere es la gloria, recordar olvidar, por todos los poros el mundo encantador de caramelos, siempre naranja, como una explosión de ternura incomprensible y la naturaleza entera del amor, solo eso.
1 comment:
que sensibilidad...,que ganas de acariciar...
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